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ZINC-NÍQUEL ALCALINO

Tratamiento realizado en estático, con un bastidor específico para cada referencia. Aleación binaria de Zinc con un porcentaje óptimo de Níquel en el intervalo del 12 – 15 % (contenido que se correspone básicamente con la estructura de la fase ɣ), altamente resistente a la corrosión, particularmente apropiado para piezas de acero con bajo contenido en Carbono. El porcentaje de Níquel no debe exceder del 16% para que el depósito mantenga el potencial anódico respecto al substrato de acero. En caso contrario, la resistencia a la corrosión disminuye considerablemente al convertirse el depósito en catódico respecto al substrato, es decir, se hace más noble que el acero de la pieza dejando de protegerle. Posee asimismo una alta resistencia a la abrasión y una micro dureza del orden de los 450 HV. No produce corrosión galvánica cuando está en contacto con piezas de Aluminio y Magnesio de uso habitual en la industria aeroespacial.

 

El depósito de Zinc-Níquel alcalino es resistente a las altas temperaturas. A diferencia del cincado convencional mantiene su resistencia a la corrosión aún a temperaturas elevadas (< 250ºC) superando las 720 horas a la corrosión roja según el test DIN EN ISO 9.227 de acuerdo con la ausencia de cambios significativos en la microestructura de los depósitos según los difractogramas por rayos-X obtenidos después del proceso de simulación.

 

Zinc-Níquel para el sistema Caucho-Metal. La muy buena adherencia entre la capa de Zinc-Níquel pasivada y el primer hace que sea el tratamiento más indicado para aquellas piezas que después requieran un vulcanizado posterior dando resultados superiores a los 50 kg.cm-2en los ensayos de rotura por cohesión.

 

Zinc-Níquel dúctil. Cuando queremos aplicar una deformación metálica posterior al recubrimiento, es crucial la ductilidad del depósito. Las propiedades físicas como la ductilidad de un depósito de Zinc-Níquel vienen condicionadas por la orientación cristalográfica de la fase ꝩ. Los ensayos realizados nos muestran que la orientación (330) es mejor que la (600) por lo que se requiere una formulación específica que nos proporcione depósitos con estas características. Nuestro proceso, consigue superar el test según ASTM 8401, con un diámetro del mandril de 10 mm., tanto para el esfuerzo de tracción como de compresión.

A continuación presentamos un difractrograma rayos X de una probeta con el Zinc-Níquel alcalino brillante adecuado para piezas no sujetas a deformabilidad posterior al recubrimiento. Se observa el predominio casi total de la orientación cristal·lográfica (600):

 

Y ahora un difractrograma de una probeta con el Zinc-Níquel alcalino adecuado para deformabilidad posterior al recubrimiento. Se observa como el pico de la orientación cristallográfica (330) aumenta considerablement de intensidad:

 

Zinc-Níquel para aquellas piezas de acero de alta resistencia a la tracción susceptibles de fragilidad por hidrógeno. Se constata que hay dos principales variables responsables de la fragilización por hidrógeno. a) El hidrógeno que se genera durante el proceso de la electrodeposición y b) la permeabilidad del hidrógeno en la capa. PREMA, S.A., formula un electrolito de Zinc-Níquel alcalino específico para aquellos casos donde se considere estrictamente necesario realizar un deshidrogenado muy eficaz (por ejemplo, a partir de aceros de 1.150 MPa) debiéndose realizar el pasivado con posterioridad  al deshidrogenado para evitar por un lado el daño efectuado en la capa de pasivado por el tratamiento térmico y por otra que la mencionada capa de pasivado impida la eliminación del hidrógeno.

 

Pasivado posterior a base de Cromo trivalente (con o sin sales de Cobalto) pudiendo dar los acabados tipo transparente, azulado, irisado y negro. Posibilidad de aplicar un sellado órgano-mineral o inorgánico, con o sin aditivos, para controlar el coeficiente de fricción y aumentar la resistencia a la corrosión.